El COVID-19 definitivamente tuvo un impacto muy fuerte en la industria del entretenimiento. Sí, muchos videojuegos fueron retrasados, algunas series de TV tuvieron que adaptar nuevas medidas para continuar filmando, pero en el caso del cine, pues ni siquiera hemos tenido nuevas películas en meses. Con la gran mayoría de complejos cerrados, las grandes productoras de Hollywood optaron por recorrer sus siguientes estrenos hasta el próximo año, entonces ¿qué futuro le depara a la industria cinematográfica?
Es evidente que estos meses están provocando pérdidas multimillonarias para los cines, y no solamente por la falta de estrenos. Las medidas de sanitización también les genera un costo, así que de alguna manera tienen que recuperarse. De acuerdo con el CEO de AMC Theatres, Adam Aron, los precios de las entradas podrían aumentar una vez que acabe la pandemia.
Durante la más reciente junta de accionistas, se anunció que AMC Theatres había perdido $561 millones de dólares en tan solo tres meses. Como dije antes, parte de eso se debe a la falta de estrenos, pero aparentemente el gasto mayor viene de las nuevas medidas sanitarias. Para cubrir este gasto, las cadenas de cine deberán sacar más dinero de sus clientes, y aunque sí, no hay duda alguna que los cines se volverán extremadamente populares una vez que la pandemia haya acabado, se estima que las nuevas medidas sanitarias se vuelvan un estándar de la industria, y como consecuencia, los costos de entrada podrían aumentar.
