Mientras el dirigente nacional del Partido Revolucionario Institucional sostenía una reunión con expresidentes del PRI, en Campeche (la ciudad capital del estado que gobernó) se observó que elementos de la policía ministerial realizaron una diligencia de inspección judicial alrededor de una de sus casas.
Los agentes que se trasladaban en unas veinte camionetas y patrullas cercaron la mansión, pero no ingresaron.
En contra de Alejandro Moreno hay varias carpetas de investigación en la Fiscalía General de la República (FGR) por presunto enriquecimiento inexplicable y supuestas operaciones con recursos de procedencia ilícita.
La gobernadora de Campeche, Layda Sansores, difundió una serie de audios en los que se escucha la voz de Alejandro Moreno mientras se confabula para realizar fraudes y desviar recursos públicos, y sostuvo que presentó una denuncia en su contra en la FGR. Además, una vez conocidos los audios, Germán Castillo Banuet, fiscal especializado en Control Regional de la FGR confirmó que se inició una indagatoria.
Me quieren intimidar
Moreno Cárdenas se refirió al operativo montado hoy en su residencia, en Campeche, que –se presumió– podría tratarse de un cateo.
“No fue un cateo, fue un acto de persecución política, es un acto de intimidación”, expresó Alejandro Moreno en la conferencia de prensa que brindó cuando concluyó la reunión con los expresidentes priistas.
Acusó a la gobernadora de Campeche, Layda Sansores, de haberlo amenazado a él y a su familia, por lo que anunció que sí recurrirá a la siguiente instancia en la tramitación del amparo, sobre el que hoy un juez de la Ciudad de México se declaró incompetente.