El COVID-19 tiene varios síntomas característicos como la tos, la cual puede persistir por semanas y hasta meses después de superar la enfermedad. Se estima que el 2.5% de las personas contagiadas en algún momento, siguen tosiendo.
¿Por qué permanece la tos después de tener COVID-19?
De acuerdo con los Institutos Nacionales de Salud (NIH, por sus siglas en inglés), aún no se sabe exactamente por qué se desarrolla el síndrome post-COVID o long-COVID en algunas personas, aunque hay evidencia emergente de que en el sexo femenino, la presencia de comorbilidades respiratorias y la gravedad de la enfermedad podrían predecir este síndrome.
“A diferencia de la tos que persiste después del resfriado común o la gripe, la tos crónica en el síndrome post-COVID suele estar acompañada de otros síntomas, lo que podría indicar que se debe a factores tanto genéticos como ambientales”
Woo-Jung Song
De acuerdo con la investigación al respecto de la tos persistente después de superar el COVID-19, la presencia prolongada de fatiga, disnea, dolor y tos podría indicar un trastorno del Sistema Nervioso Central (SNC), por lo que su estudio es fundamental para comprender sus implicaciones clínicas.
La doctora Natasha Yates, profesora de la Universidad Bond en Gold Coast, Australia, atribuye la tos a que el SARS-CoV-2 afecta el tracto respiratorio, por lo que funciona como un mecanismo de defensa para eliminar irritantes, virus y mucosas invasoras en el organismo.
¿Qué hacer al respecto de la tos persistente?
El Servicio Nacional de Salud de Estados Unidos (NHS, por sus siglas en inglés) ofrece una serie de recomendaciones para ayudar a contener la tos persistente por la infección del COVID-19, ya sea seca o con flemas:
Consejos para tratar la tos seca
Mantenerse bien hidratado bebiendo pequeñas cantidades a menudo durante el día
Tratar la garganta bebiendo una bebida caliente, como miel y limón
Tomar pequeños sorbos de líquido cuando comience la tos
Chupar dulces azucarados cuando se empieza a toser
Intentar tragar repetidamente si tiene tos y no tiene una bebida cerca de usted
Sonarse la nariz si hay secreción nasal
Tips para ayudar en la tos con flemas por COVID-19
Mantenerse hidratado
Inhalar vapor
Intentar acostarse de cualquier lado lo más plano que pueda para ayudar a drenar la flema
Moverse para ayudar a mover la flema
Probar técnicas de control de la respiración si se muda a un área con una temperatura diferente
Respirar por la nariz; respirar por la boca puede hacerlo toser más
¿En qué momento deberías acudir con un médico por la tos posterior al COVID-19?
Según el artículo publicado en el portal de The Conversation, en primer lugar no se debe atribuir inmediatamente la tos a un síntoma del COVID largo para no pasar por alto otras causas graves de tos crónica. El primer paso es comprobar que no se trate de una infección bacteriana secundaria, cuyos signos son:
Cambio en el tipo de tos (sonidos diferentes, más frecuentes)
Cambio en el esputo/flema (aumento del volumen, presencia de sangre)
Aparición de nuevos síntomas como fiebre, dolor de pecho, palpitaciones o empeoramiento de la disnea (ahogo o dificultad en la respiración)
Otras enfermedades potencialmente graves, además del COVID-19, pueden causar tos crónica, como insuficiencia cardíaca y cáncer de pulmón, por lo que se recomienda hacerse un chequeo en caso de alguna duda sobre la causa de la tos.