“Se está muriendo (la gente), eso es verdad. Es lo que es” dijo.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, dijo que el brote de coronavirus está tan controlado como puede estarlo en su país, donde al menos 155.000 personas han muerto por el COVID-19.
El presidente republicano continuó presionando para que las escuelas de Estados Unidos vuelvan a abrir en una publicación de Twitter durante la noche, y defendió la respuesta de su Gobierno al virus en una entrevista con el sitio web de noticias Axios publicado el lunes por la noche.
“Se está muriendo (la gente), eso es verdad”, dijo. “Es lo que es. Pero eso no significa que no estamos haciendo todo lo que podemos. Está bajo control tanto como uno puede controlarlo. Esta es una plaga horrible”.
Los casos de coronavirus continúan aumentando en el país y decenas de estados de Estados Unidos han tenido que poner pausa o revertir sus planes de reapertura.
La coordinadora del grupo de trabajo sobre coronavirus de la Casa Blanca, la doctora Deborah Birx, dijo el domingo que el virus está “extraordinariamente extendido” en las zonas rurales y en las ciudades.
Cuando las muertes en Estados Unidos llegaron a un récord, Trump presionó para contabilizar los fallecidos en función del número de casos y no como una proporción de la población, una comparación en la que al país le va peor que a otras naciones occidentales.
En la entrevista de Axios, Trump insistió nuevamente en que el aumento de las pruebas de diagnóstico en Estados Unidos explica el aumento de los casos, una afirmación cuestionada por expertos en salud que dicen que las pruebas ampliadas explican parte, pero no todo, el crecimiento de los casos.
Los expertos en salud también lo llaman una herramienta clave para combatir la propagación de la enfermedad, que se había detectado en al menos 4,6 millones de personas en Estados Unidos hasta el sábado.